De pequeña,mis padres me llevaban al centro de Málaga. Recorría las calles sin saber su historia,sin saber siquiera de donde procedemos. Sin saber,que ocurría en aquellos rincones de la ciudad mágica,en la que vivimos y muy pocos la descubrimos. En cada rincón una anécdota,graciosa,triste o romántica. Un sentimiento. Una emoción.
Muchas veces pensamos en que queremos vivir en otros sitios,sin mirar lo que tenemos aquí. Nuestra playa,ese olor a espeto de sardina haciéndose en un chiringuito de la playa,esos pescadores saliendo de madrugada a pescar en una simple embarcación de madera,pintada de verde y rojo.
Cuando paseamos por el centro de la ciudad,vemos el ayuntamiento,y vemos esa bandera verde y morada que nos representa. Esa bandera de la que tenemos que sentirnos orgullosos,porque cuando nos vayamos de aquí,echaremos de meno todo esto. Esa morriña nos entrará cuando el olor a sal no nos invada en medio de la playa de la Malagueta,no podamos comernos un espeto de sardinas en la playa,no podamos ir al festival de cine de Málaga o simplemente,no podamos admirar esa belleza que cubre nuestra ciudad y que no queremos ver. Echaremos de menos al biznaguero en agosto,con una penca en la mano,su pantalón negro,faja roja y camisa blanca con
las biznagas en la mano,dejando el olor a jazmín por todas las calles de la ciudad. Por las calles que un día estuvieron fortificadas por los árabes. Las que un día,conquistaron los reyes católicos y la que un día se convirtió en una ciudad grande. Humildad y orgullo recorren nuestras venas,humildad y orgullo es la base de nuestra educación.
Por calle Larios,en Semana Santa se huele el incienso de Nuestro Señor Cautivo,del barrio de la Trinidad,saliendo con su túnica blanca,encadenado,con una alfombra de claveles rojos custodiándolo. El Señor de Málaga. Los hombres de trono lo encumbran en el Lunes Santo. Lunes de Pasión. Lunes de lágrimas por los fieles. Lágrimas por la emoción de verlo caminar por las calles iluminadas de Málaga,por la Alameda principal. Llena de flores,y gente sentada en su silla. Niños malagueños esperando a que en su bola de cera caiga algo de ella. De los cirios de los nazarenos que coloren las calles. Las bandas tocan al son de los pasos,al son de los portaleros. Al son que se mueve Málaga.
Málaga es vida,es sol,es playa. Málaga es orgullo,humildad,pasión. Málaga,lo tiene todo.
Atte: Ainara Villalba.
las biznagas en la mano,dejando el olor a jazmín por todas las calles de la ciudad. Por las calles que un día estuvieron fortificadas por los árabes. Las que un día,conquistaron los reyes católicos y la que un día se convirtió en una ciudad grande. Humildad y orgullo recorren nuestras venas,humildad y orgullo es la base de nuestra educación.
Por calle Larios,en Semana Santa se huele el incienso de Nuestro Señor Cautivo,del barrio de la Trinidad,saliendo con su túnica blanca,encadenado,con una alfombra de claveles rojos custodiándolo. El Señor de Málaga. Los hombres de trono lo encumbran en el Lunes Santo. Lunes de Pasión. Lunes de lágrimas por los fieles. Lágrimas por la emoción de verlo caminar por las calles iluminadas de Málaga,por la Alameda principal. Llena de flores,y gente sentada en su silla. Niños malagueños esperando a que en su bola de cera caiga algo de ella. De los cirios de los nazarenos que coloren las calles. Las bandas tocan al son de los pasos,al son de los portaleros. Al son que se mueve Málaga.
Málaga es vida,es sol,es playa. Málaga es orgullo,humildad,pasión. Málaga,lo tiene todo.
Atte: Ainara Villalba.
Biznaga, con B.
ResponderEliminarPrecioso texto, enhorabuena.